El estilo industrial en el diseño de interiores y objetos ha existido por mucho tiempo y sigue marcando tendencia. Una de las maneras más fáciles de incorporar este estilo en casa es con el uso de materiales industriales, el cemento es una opción obvia, es común en paredes y pisos, y tambien incorporar el concreto en el mobiliario.
Hemos sido testigos del creciente aumento del uso del concreto en el diseño industrial, muchos diseñadores lo están empleando de formas inesperadas e inusuales. Parece ser que no hay nada que no se pueda lograr con este versátil compuesto imprimiendo su maravillosa apariencia a prácticamente todo lo que se nos ocurra. Maleabilidad, resistencia, durabilidad y capacidad de incorporar texturas y colores al acabado final son algunas de las propiedades que nos ofrece y que debemos tomar en cuenta a la hora de emplearlo como materia prima en algún proyecto. Con el concreto se puede conseguir superficies uniformes y continuas, esto lo hace perfectamente aplicable como tope de todo tipo diseño.
Le podemos dar diferentes acabados, mate, satinado o con brillo para una apariencia moderna. Sin embargo es válido el uso de texturas y la forma rústica del material, dependiendo del uso que se le dará a la superficie y el estilo que se busca recrear.
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